Fa anys era assignatura obligatòria a l'escola
Ara voldria fer una petita recopilació de les
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URBANIDAD EN VERSO (para uso de las niñas) Obra declarada de texto en la península por decreto de 18 de Enero de 1875 |
3. La URBANIDAD nos enseña á tratar los superiores, iguales e inferiores, con finura y discreción; sin ella fuera enojosa la vida por mil conceptos; ved, pues, niñas, sus preceptos de cuanta importancia son. 23. Cuando fueres reprendida nunca te parezca injusto, ni pongas el ceño adusto al padre, madre ó tutor; resígnate, y algún día concebirás claramente que es el "castigo prudente un beneficio mayor". 25. Vive en paz y sé sufrida con tus hermanas ó hermanos; sólo en pechos inhumanos se puede el odio albergar. Tratarás con miramiento á tu criada ó camarera, que aunque es de más baja esfera, no debes de ella abusar. 29. Ante todo el Catecismo aprenderás diligente, como asunto el más urgente y de mayor entidad; que el estudio de las ciencias, sin la Doctrina cristiana, es ocupación muy vana; sólo es humo y vanidad. 30. Aprended á hacer calceta y otras labores precisas, como el corte de camisas, de vestidos, el coser, bordar de varias especies, el manejo de la plancha y, en fin, todo lo que ensancha la instrucción de la mujer. 43. Jamás adoptéis la moda de vestir muy escotadas como aquellas descocadas que en nada estiman su honor; vosotras tened presente lo que la moral reclama: "La mujer pierde su fama cuando ha perdido el pudor". 66. Vuelve á un lado la cabeza cuando escupir es preciso, y la saliva, te aviso, que al instante pisarás; si te hallas en un estrado, los esputos en el suelo no arrojes, en el pañuelo ó en la artesilla echarás. |
40. Lávate manos y cara luego que te hayas vestido, y hacer lo mismo es debido cuando sucias las verás; córtate también las uñas, si necesidad hay de ello; péinate, en fin, el cabello, y limpio lo mantendrás. 44. Enjuágate cada día la boca, y limpia los dientes, con tal que no haya presentes, personas de autoridad. Toma baños de limpieza, mayormente en verano, y los pies también es sano de vez en cuando lavar. 84. La mujer que todo el día divaga fuera de casa, que en el tocador lo pasa, en la puerta ó el balcón, á sus quehaceres domésticos ¿cómo es posible que atienda, ni siquiera que comprenda de su sexo la misión? 94. Delante de otros evita el vestirte y desnudarte; las uñas no has de cortarte, ni á nadie al oído hablar; tampoco interrumpir debes al que habla ó cuenta dinero, siendo también muy grosero lo que otro escribe mirar. 95. Los pies y nariz no hurgues, ni te suenes con ruido, y lo que de ella ha salido es asqueroso mirar. Los labios y uñas morderte evita, y desperezarte; las manos no has de frotarte ni los dedos estirar. 96. Ya estés en pie, ya sentada, mantén el cuerpo derecho sin caerte sobre el pecho ni la cabeza voltear; advierte que es de gañanes saludar dando palmadas, hablar con pasmarotadas y á cada instante jurar. 104. Siempre que á alguna persona dirigirte se te ofrezca, no te arrimes que parezca que la tratas de besar; hablar con ella jadeando sería cosa ofensiva, y su rostro con saliva guárdate de salpicar. Epílogo106. La niña buena cristiana,instruida, laboriosa, cortés, discreta y que goza de un sensible corazón, circunstancias atesora tan nobles y relevantes, que inspira á sus semejantes aprecio y admiración. |